¿Por qué debes poner en práctica la crianza positiva?
UNICEF brinda las siguientes herramientas para que rompas con el estilo de crianza con el que creciste y puedas establecer límites sanos en tus hijos.
La crianza positiva es el conjunto de prácticas de cuidado, protección, formación y guía que ayudan al desarrollo, bienestar y crecimiento saludable y armonioso de las niñas, los niños y los adolescentes.
Eso quiere decir que no se ejercen maltratos y castigos físicos o humillantes como golpes, azotes, nalgadas, amenazas, gritos, regaños o críticas atemorizantes.
Un gran desafío para los padres y cuidadores que en su infancia recibieron una crianza basada en el miedo o en el abuso de la fuerza. Dejar atrás los métodos violentos y autoritarios, para dar paso al buen trato.
La razón, la sensibilidad, el amor, la igualdad, la tolerancia y el respeto son las bases de esta crianza.
¿Qué debes tener en cuenta?
- La evolución de sus facultades.
- La edad en la que se encuentra.
- Las características y cualidades, sus intereses, motivaciones y aspiraciones.
- La decisión consciente de no recurrir a castigos físicos ni a tratos humillantes.
- El respeto a sus derechos.
¿Cuáles son los resultados de la crianza positiva?
- Actúan bien cuando se sienten bien.
- Se desarrollan y viven mejor cuando sus padres y cuidadores.
- Son cariñosos y comprensivos.
- Comparten más tiempo con su familia.
- Conocen su vida y comprenden su conducta.
- Construyen acuerdos y normas claras.
- Tienen expectativas de acuerdo con sus capacidades.
- Tienen apertura para la comunicación.
- Reaccionan a sus comportamientos aplicando medidas adecuadas y ofreciendo explicaciones.
La educación respetuosa no significa promover un estilo de crianza permisivo, tampoco renunciar al papel de autoridad; significa respetar la dignidad del menor en todo momento con límites claros.